Mis viejos calcetones de estambre

El pasado verano me compre un paquete de calcetones de algodón gruesos para usarlos con mis tenis y sobre todo en invierno para dormir mejor,ya que soy friolento por naturaleza,mas de los pies,en esas noches frías de nuestro invierno,craso error, no me sirvieron.
Busque en mis cajones, aquellos que mi madre me había tejido con estambre de lana,que esos si me hacían dormir mejor,guardando mi calor natural,Magnolia,una paciente mía,me había regalado otros que ella misma tejió,hace mas de 40 años y que aun conservo,pacientes agradecidos,que guardo en mi corazón.
Como han cambiado los tiempos,aun ahora,mi madre me sigue cuidando y dandome ese calor,tan necesario,en esta atribulada vida,también el agradecimiento hacia Magnolia,sigue vigente.El amor de las madres antiguas a ido desapareciendo,aquellos cuidados personales,aquellas cercanías amorosas responsables de las madres a los hijos,van desapareciendo.Es mas,todos aquellos lazos familiares,se van extinguiendo,ahora hay mas divorciadas,mas madres solteras,muchísimo menos se ven aquellos lazos responsables,amorosos,efectivos.Hay mas mujeres desnutridas de amor,amargadas,irresponsables con sus hijos,creando mas seres conflictivos,irresponsables,inmaduros,algunos manifestando los síntomas consecuenciales de esa pobreza interior,mas violentos,abusando de la comida obesos,usando y abusando de las diferentes drogas dañinas,acrecentando la violencia de este mundo en donde se ve por doquier,el aumento de la violencia familiar,de la delincuencia,aumento de la tensión mundial,por las amenazas de guerras.mas inseguridad general.
Tuve la fortuna de tener una muy buena madre,su calor me sigue llegando, al darme su calor,con mis viejos calcetones de estambre  que ella me obsequio.Gracias,muchas gracias,por todo ese Amor que recibí.