En el hombre,el brote del deseo tiene orígenes biológicos principalmente,aunque aparentemente parezcan de origen psíquico.
Generando incongruencia,ya que serán muy diferentes las reacciones,antes y después de la satisfacción del deseo.
La pseudo amabilidad y cordialidad predominaran en la primera etapa,siendo seguidas de un periodo refractario,en la segunda,dando la impresión de falsedad e hipocresía,ya que faltaran la estabilidad y la congruencia,mas cuando el verdadero amor es poco o inexistente,creando relaciones inestables y neuróticas.
Los seres humanos no adquirimos conciencia de este fenómeno,hasta muy tarde o nunca.
Lo mejor es "despertar" a tiempo y prever,para mantener y fomentar una mejor relación o evitar caer en situaciones,que arrebatan la paz interior,como castigo.
El pago que el ser humano hace,por experimentar estos procesos,es muy alto,así como las consecuencias,como los embarazos no deseados,las enfermedades venéreas y las alteraciones que sufre la paz interior.
Hay que estar alertas para no caer en estas trampas,que son fundamentalmente de naturaleza biológica.
Los valores,los principios deben gobernar o se aparecerán las consecuencias materiales,familiares y sociales.
Ambos,mujeres y hombres,debemos adquirir la conciencia de estos procesos,lo mas pronto posible,para evitar al implacable sufrimiento.
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